Detrás de cada fiesta que Sarapura lleva a otro nivel, hay un equipo de personas apasionadas por la música que se potencian para crear momentos únicos. En esta nota, Juan Diego Martínez Larrea y Paula Gallardo nos cuentan su historia como DJs, las mejores experiencias como equipo y las claves de Sarapura para transformar cada evento. Juan Diego, DJ y cofundador de Sarapura, tuvo su primer acercamiento a la música en los años 90 cuando empezó a trabajar como plomo para un DJ profesional. Al guardar los equipos de música en su casa, empezó a practicar lo que sería su verdadera pasión y el trabajo de su vida: “Me parecía fascinante pasar de una canción a otra y que no se note la división: me enamoré de ese efecto”. Paula Lagaïa es nutricionista y para ella la música era simplemente un pasatiempo. En un viaje de dos meses a Tulum entendió que podía convertirse en algo más que un hobby. “Antes tocaba en boliches para pasarla bien. En ese viaje me di cuenta que podía vivir de esto: a los 15 días de haber vuelto tenía laburo como DJ”, cuenta. Hoy Pau es la cabeza de un equipo de más de 30 DJs y, junto con Juan Diego, una pieza fundamental en Sarapura. Al momento de trabajar juntos se potencian, y si comparten cabina, hay fiesta asegurada. La combinación de la tranquilidad de Pau con la energía de Juan Diego crean un microclima mágico: buena onda, conexión en la cabina y con la gente y explosión. “Llevo mucho condimento a la fiesta: sirenas, inflables y todas esas cosas”, agrega el DJ. El motivo del éxito es lógico: en Sarapura se trabaja en duplas porque el trabajo en equipo es primordial. “La pareja hace que el laburo sea mejor, porque nosotras estamos pensando mucho arriba de la cabina, y dos cabezas piensan mejor que una”, confiesa Juan Diego. Con muchos desafíos en el camino, hoy están liderando proyectos nuevos dentro de la empresa y uno de ellos implica llevar la chispa Sarapura hacia afuera. Sarapura en Europa La decisión - quizás - más importante del 2024. Sarapura en Europa se convirtió en realidad. Y los líderes del proyecto se encargaron de empapar tierras españolas de buena energía, música y el condimento Sarapura que necesitan todos los europeos. En mayo del 2024 Juan Diego decidió viajar a Europa para llevar la experiencia Sarapura al exterior. “La primera vez fui con Tincho Gaviña y con Fran, uno de mis hijos, para investigar. Tenemos un producto súper interesante para llevar, pero los europeos no consumen tanto eso. Por ende hay que generar la demanda para después darles lo que hacemos”, explica Juan Diego. Además, resalta la diferencia entre el público argentino y el europeo: mientras el primero es más descontracturado y enérgico, el segundo suele ser más estructurado, tranquilo y protocolar. Ahora bien, cuando los europeos prueban una pequeña dosis de movida argentina, compran al instante. Esa fue la razón por la que Juan Diego y Paula viajaron a Ámsterdam para musicalizar la segunda parte de un casamiento argentino-holandés. Después de vivir una fiesta al estilo Sarapura en Argentina, los novios no dudaron en replicar el evento en Países Bajos. “Generamos ese impacto sorpresa que ellos realmente no esperaban. Con nosotros, todos los casamientos son joda, fiesta, descontrol. Allá no, entonces cuando ven lo que hacemos se sorprenden”, explica Paula. ¿La anécdota de la noche? Juan Diego en la pileta a las 2 de la mañana. “El novio me apuró y me dijo ‘A que no te tirás a la pileta’. A mí no me va a apurar un holandés, así que lo hice”, cuenta entre risas. Otra cualidad de nuestros DJs que sorprende al público europeo es la predisposición y las ganas de darlo todo sin pensar en los números y protocolos. “A veces nos preguntan cuántas horas de servicio son, y nosotros no tenemos horas. Es vivir toda la experiencia, la previa de ese día y a veces el después también. Es algo que ellos no entienden y se vuelven locos, es otra cosa”, menciona Juan Diego, y agrega: “Allá los DJs cobran por hora. Nosotros estamos hasta que venga la policía y nos eche, olvidate”. Estas actitudes hacen que los DJs y los novios formen un vínculo especial, como si se conocieran de toda la vida. Eso genera que para los DJs el casamiento sea muchísimo más que un trabajo: van a hacer lo que más les gusta con una energía compartida que hace feliz a cientos de personas por noche. Antes de cada casamiento, el equipo tiene una entrevista con los novios para conocer sus gustos y necesidades y crear una fiesta personalizada. Mientras Juan Diego se encarga del diseño del evento, Paula se ocupa de la música. Es en la combinación de estas dos áreas que está la clave para lograr lo que el cliente busca: “Muchas veces los novios vienen a la reunión y van directo a la música. Pero para eso, primero tiene que estar bien armado el diseño. La música acompaña el diseño de la fiesta”, explica Paula. Este trabajo previo - y colaborativo - es fundamental para llevar la esencia de Sarapura a cada evento: “Si no matchea todo, es una fiesta simpática. Nosotros no hacemos fiestas simpáticas, hacemos fiestones. Para que eso se dé tiene que estar bien diseñado y después viene el laburito que Pau hace con la música en la reunión con los novios, para ver lo que quieren. Si hay algún tema especial, lo mandamos a remixar. Le ponemos un valor agregado enorme”, remarca Juan Diego sobre las claves para garantizar un “fiestón”. Con un equipo detallista y apasionado, cada fiesta es diferente e inolvidable. Por más que sean todos casamientos, buscan que la fiesta tenga la identidad de los novios y que todos los invitados se vayan con la experiencia de que fue un casamiento diferente. El detrás de escena en Sarapura House Gran parte de esta sinergia que existe entre nuestros DJs se potencia en Sarapura House, el espacio donde cada integrante del equipo se encuentra para desarrollar todo aquello que después plasma en una fiesta. “Muchas veces creen que lo único que hace el DJ es estar en la cabina y pasar música, y la verdad es que no. Nosotros tenemos un laburo diario en la oficina, desde descargar música, armar la fiesta, juntarse con los novios. Es mucho lo que lleva a que ese día sea lo que es”, explica Paula. Juan Diego, por otro lado, destaca la diferencia entre sus diferentes roles: “Yo soy DJ el fin de semana pero en la semana soy empresario. Los DJs no están aislados, son parte de un equipo y tienen un cuerpo técnico. Hay un equipo trabajando para darles herramientas a todos los DJs para poder lograr sus propios objetivos, que se desarrollen y sean cada vez mejores”. Formar parte de un grupo tan grande como el de Sarapura puede tener algunas complicaciones, pero sin dudas son más los beneficios. Encontrarse con personas, crear equipos de trabajo, laburar espalda con espalda. Apoyarse ante todo, como trampolín para sacar adelante cada fiesta y momento. “El trabajo en equipo siempre es mejor: nos retroalimentamos entre todos”, afirma Pau. Es que las experiencias que cada uno tiene en una fiesta son distintas, pero la puesta en común entre todos hace que todo cobre otro nivel y que cada uno saque lo mejor de sí mismo. El trabajo colaborativo, la pasión por la música y la energía de nuestros DJs son algunas de las claves para que cada fiesta Sarapura sea perfecta. Juan Diego explica: “Ir a divertirte mientras trabajás es lo que hace la diferencia. Hay un montón de empresas que tienen buenos DJs y las fiestas salen bien, pero para mi tiene que haber una armonía entre todos los ingredientes de la fiesta: la música, los horarios, lo que se come, cómo se come, los espacios, la puesta, todas esas cosas”. Esa pasión es la que siempre está presente tanto en los eventos como en la casa de nuestro equipo, Sarapura House. Porque Sarapura es mucho más que una empresa: es una familia. Es un lugar en donde mucha gente se desarrolla, vive y va transitando su vida arriba de un barco gigante. Es una plataforma que rompe barreras y continúa creciendo para crear experiencias inolvidables y eventos de otro mundo.